Con excepción de la papa y el tomate, el mes de enero estuvo marcado por la suba de todos los productos frutihortícolas. Estos aumentos van a tono con la menor oferta de algunas frutas por la época del año, pero también con la suba de precios generalizada y de los combustibles en particular.
El tomate bajó por segundo mes consecutivo tras el gran aumento que sufrió en noviembre. Cotizó a $240,94, es decir, un 34,32% menos que el mes anterior. Si se observa en moneda constante, registró una caída del 27,68%. Esto se debió al aumento de la oferta del tomate comercial. Además, los lotes fueron de baja calidad ya que las altas temperaturas provocaron un exceso de madurez.
Siga leyendo el contenido exclusivo. Si ya es un usuario, inicie sesión. De lo contrario puede suscribirse a continuación para acceder a todo el contenido exclusivo.